En nuestros días, el arte puede liberar al hombre de su confusión devolviéndole lo que ha perdido: éste fue el mensaje de Kandinsky, creador de la pintura abstracta. No se trata de representar el planeta de los objetos, sino más bien nuestra vida interior. ¿De qué manera pintar y hacer ver las conmuevas escondes de nuestras ánimas, de qué forma enseñar lo invisible? Considerada &@171;difícil&@187;, la pintura abstracta abre paradójicamente el paseo cara una cultura realmente popular y converge con el arte preocupado por lo sobrenatural, con el arte sagrado, como nos explica Michel Henry. ...